Smart Residences, una nueva forma de vivir y compartir

Con el avance de la sociedad a todos los niveles y el aumento progresivo de la esperanza de vida, surgen nuevas necesidades ocupacionales que demandan soluciones constructivas eficientes y funcionales para dar respuesta al bienestar físico y emocional de las personas.

Las Smart Residences son una novedosa alternativa que permite fomentar el envejecimiento saludable, creando espacios cómodos y funcionales para que nuestros mayores puedan ser y hacer lo que para ellos es importante. Todo ello, con criterios funcionales que aseguren el bienestar de sus ocupantes y bajo una eficiencia constructiva que garantice la optimización de plazos y un resultado de máxima calidad.

Con estas premisas, la construcción industrializada en Plataforma 3D se convierte en el sistema constructivo idóneo para dar respuesta a estas necesidades. Mediante el sistema constructivo 3D se reduce el plazo en, al menos, un 50%, lo que permite poner en funcionamiento el centro en la mitad de tiempo.

Las dimensiones de las habitaciones y los espacios son óptimas para la seriación y estandarización de sus componentes, que serán producidos en fábrica y transportados hasta la ubicación final, donde quedarán ensamblados y operativos con estrictos controles de calidad y seguridad. Esta seriación, nos permite optimizar costes y transportar elementos con un importante valor añadido.

Las Smart Residences ofrecen unidades habitacionales como hogares personalizables y cuentan con unidades compactas con amplios espacios comunes para fomentar la interacción entre los usuarios.  La accesibilidad y el confort hacen que los espacios cubran, con creces, las necesidades básicas de la gente mayor. Además, la unión de módulos con largo variable permite la generación de pequeñas terrazas o miradores – espacios controlados de relación con el exterior-, que ayudan a convertir las distintas unidades habitacionales en entornos más domésticos. El objetivo es conseguir que el residente se sienta como en casa.

El control y la optimización de los recursos energéticos junto con la atención asistencial logran la satisfacción del usuario, mejorando la eficiencia y rentabilidad del centro.

Las Smart Residences son otra muestra más de la versatilidad de la construcción industrializada a la hora de abordar proyectos que resuelven necesidades concretas de las personas y de construir edificios más saludables.

Mediante una Ingeniería de Procesos, ya es posible diseñar, optimizar, operar, controlar y gestionar procesos de transformación de materiales en productos de una manera sostenible, segura, rápida y a un bajo costo.  Además de favorecer el acceso de la mujer a empleos en toda la cadena de valor del sector de la construcción la industrialización garantiza el ahorro de agua durante la fabricación y la eficiencia energética durante toda la vida útil del inmueble.